Las personas responden en forma predecible tanto a los incentivos positivos como a los negativos. Los incentivos económicos son los premios o los castigos adicionales que las personas reciben por comprometerse más o menos en una actividad particular. Los precios, los sueldos, las ganancias, los subsidios, y los impuestos son incentivos económicos comunes. (Amplie el tema con la guia 04, busquela en el blog).
Una compañía de Internet en la Ciudad de México recientemente probó la idea de otorgar a los dueños de mascotas un regalo por recoger las heces de sus perros de los parques públicos. La gente pone los desechos de sus perros en un contenedor especial que calcula el peso de las heces. El contenedor calcula los minutos de acceso gratuito a Wi-Fi equivalentes a los gramos de materia fecal recolectada. He aquí otra muestra de cómo se trata de influir en nuestro comportamiento, para bien o para mal, con recompensas. El premio: acceso gratuito a una conexión Wi-Fi y parques limpios.